Desde siempre el ser humano tiene la necesidad de creer en alguien. Hace algunos miles de años, cuando estábamos todavía muy en contacto con la naturaleza, pensábamos que los dioses estaban encarnados en las fuerzas que la gobernaban, ya fuesen animales, plantas o fenómenos meteorológicos. Más adelante, empezamos a construir lugares sagrados para rendirles culto, pero no fue sino hasta la llegada del cristianismo cuando la humanidad pudo contemplar unas de las más maravillosas obras arquitectónicas llamadas basílicas.
Al principio, la basílica era un edificio público que utilizaban los griegos y los romanos como tribunal, pero desde el surgimiento del cristianismo (siglo IV), es una iglesia que ha obtenido el título honorífico de basílica por parte del Papa, estos edificios sagrados se utilizaban como lugar de reunión para los actos religiosos (litúrgicos).
Una basílica está considerada como una iglesia destacada, por el hecho de que se ha desarrollado un acontecimiento particular, que muchos fieles acuden en peregrinación, que contiene reliquias únicas o por su valor arquitectónico. Con el tiempo, el término basílica sirvió para catalogar a las iglesias que habían sido dotadas de privilegios y reconocimiento entre la comunidad cristiana. En la actualidad, las basílicas son un referente arquitectónico y religioso.
En España podemos observar muchas realmente bonitas, como la Basílica de la Sagrada Familia (Barcelona), la de la Catedral de Granada, la Basílica de San Vicente (Ávila), la Basílica de San Francisco el Grande (Madrid), o la que empezaron a construir hacia el 1229 y terminaron en 1601 en la capital de la isla donde nací (Mallorca), la Catedral-Basílica de Santa María de Palma, más conocida como la Catedral de Palma o La Seu en catalán.
Para que un templo pueda alcanzar el título basilical, debe reunir tres requisitos:
- Debe ser un templo de regio esplendor, levantado con un perfil destacado.
- Dicho templo debe ser foco espiritual de una comunidad que es santuario para la multitud de devotos que acuden a él.
- Que dicho templo, bajo sus bóvedas, posea un tesoro espiritual y sagrado, dando culto ininterrumpido al Señor, a la Virgen y al Santo venerado en él.
Dentro de sus características tenemos que su arquitectura es bastante emblemática ya que es un diseño propio del período grecorromano. Aunque pueden tener ciertas variaciones (y es lógico) debido a la cristianización del imperio. Asimismo, como lugares de culto destacados dentro de la religión, estos poseen una estructura imponente (aún más para la época en donde se erigieron). Aunque cabe mencionar que las basílicas fueron construidas antes de la llegada de la religión, en ese entonces cumplían funciones gubernamentales y civiles.
Pero como ya sabemos, el término de basílica es un reconocimiento honorífico por parte de la élite religiosa y admirada por el pueblo formando parte de su historia y cultura en dicha región en la que se encuentre ubicada. Si bien es cierto, tanto las catedrales como las basílicas son iglesias, sin embargo, hay una serie de diferencias que tenemos que conocer. Por un lado , tenemos el término ‘’iglesia’’ que hace más referencia a la congregación de los fieles cristianos, mientras que la catedral es el templo donde tiene sede o cátedra el obispo, estas existen en todas partes del mundo con formas arquitectónicas muy variadas.
(Imagen 03) Iglesia o Catedral
Existe una gran confusión a la hora de diferenciar las catedrales y las basílicas. Ambos templos pueden parecer similares si no sabemos sus diferencias, ya que de hecho es muy común confundir el nombre de estas dos clases de edificios religiosos. A pesar de que no suele ser muy corriente, una catedral puede igualmente tener el título de basílica, puesto que este último es ante todo un título honorífico y no administrativo.
Las obras arquitectónicas más antiguas se remontan al origen del cristianismo, pero hoy en día se construyen templos cristianos modernos y muy originales.
¿Basílica o Catedral? ¿Cómo diferenciarlas?
Tanto la basílica como la catedral son dos de las principales construcciones arquitectónicas del cristianismo; sin embargo, tienen varias diferencias. Las basílicas se empezaron a construir antes de que existiera la religión cristiana, estos son edificios grandes, muy llamativos, que se utilizan para transmitir la religión. Por otra parte, una catedral, es una iglesia en la que el obispo coloca su sede, es decir desde donde gobierna una región geográfica y administrativa que depende de esta catedral. Por lo tanto, es la iglesia principal de la que dependen las otras iglesias de esta región, de ahí el hecho de que se trate normalmente de edificios imponentes y decorados con gran riqueza.
Entre otras diferencias tenemos que:
- Las Catedrales fueron construidas después de la consolidación del cristianismo en Europa, mientras que las basílicas se erigieron durante el período grecorromano.
- Una basílica es una iglesia que ha sido reconocida entre los creyentes y autoridades eclesiásticas, pero una catedral representa la sede religiosa y administrativa principal en donde ejerce el obispo de una determinada zona geográfica.
- La arquitectura de una catedral es mayormente gótica, en cambio, el de una basílica consta de tributos más romanos y griegos, propios de su época de construcción.
- Una catedral también puede ser considerada “una basílica” ya que es un título de respeto, pero una basílica no puede ser nombrada como catedral, ya que está fijada como tal desde la cristianización.
Basilicas y catedrales
en peru
En nuestro país, también se encuentran estas grandes obras arquitectónicas, en su mayoría ubicadas en la capital , específicamente en el centro histórico de Lima. Tales como:
- Catedral de Arequipa
- Catedral de Ayacucho
- Catedral del Cuzco
- Iglesia de la Merced (Cusco)
- Basílica y convento de Nuestra Señora de la Merced (Lima)
- Basílica de María Auxiliadora (Lima)
- Catedral de Puno
- Catedral de Trujillo
- Basílica y Convento de San Francisco de Arequipa
- Basílica y convento de San Francisco de Lima
- Basílica y convento de San Pedro
- Basílica y convento de Santo Domingo
- Basílica y Santuario de Santa Rosa de Lima